El Gallo de pelea, también es llamado Gallo de Combate. El gallo de pelea es conocido por figurar en los espectáculos que se dan lugar en las gallineras, es una raza que se localiza en todos los países, sin embargo, no está permitida legalmente la actividad de peleas de gallos en todos los continentes, aunque se sabe que estas prácticas se realizan clandestinamente.

Se caracterizan porque poseen naturalmente agresividad en su comportamiento y señales de pelea necesarias para defenderse y proteger. Debido a esto, son criados con el objetivo claro de acondicionarlos para el entretenimiento del público aficionado a esta actividad.

A partir de la etapa de maduración, donde al gallo de pelea le ocurren cambios morfológicos y fisiológicos, inician las riñas. Es decir, a corta edad, y en adelante, empieza a verse necesario la separación de machos entre sí, debido a las riñas que propician por defender y no compartir su territorio. Inicialmente combaten contra su padre, y si resulta perdedor y no muere, escapa para terminar de madurar y así, cuidar y proteger al nuevo grupo que lo haya acogido. Los gallos, como sabemos, son polígamos, y en el período de cría pueden llegar a ser agresivos con las gallinas que no respondan a sus necesidades sexuales. Aparentemente el gallo de pelea no evidencia miedos ni temores, así como tampoco piedad ante el que por instinto, consideran enemigo. Aunque, cada que mudan de plumaje (esto pasa cada año) los gallos de pelea disminuyen la agresividad evitando ocasionar enfrentamientos.

El gallo de pelea a diferencia de otras especies violentas, se puede domesticar, pues no ve al hombre como un rival, ni representa una amenaza.

El instinto de territorialidad los diferencia de otros tipos de gallo. Son sumamente violentos, lo que por impulso y naturaleza, los lleva a combatir hasta que uno de los dos integrantes de la pelea, muera. Esto genera admiración por parte de los espectadores y dueños, ya que lo consideran como un importante  símbolo de valentía y rudeza.

Obtener un gallo de pelea

Adquirir un gallo es de carácter meramente comercial, mientras que las gallinas que los fecundan son rotadas mediante préstamo o regalo para también, la obtención también del gallo de pelea.

La cantidad de cruces que se hacen entre esta especie en general, nos ha dejado alrededor de diez mil (10.000) razas distintas. No obstante son varias las que se han podido distinguir, debido a sus características particulares que son preferidas y por lo tanto, más apetecidas.

Los principales gallos de pelea de talla grande, están: el Malayo, el Asil, el Shamo, el  Calcuta, el francés del norte, el Belga de Brujas y el Belga de Lieja. Entre otros de talla mediana a los que han sido heredados sus genes originando nuevas razas.

Las peleas de gallos han atrapado a un gran número de personas que a su vez, dejan esta labor en sus familias para que la tradición continúe. Es un espectáculo que genera dinero a los dueños de los gallos por las peleas ganadas y a los espectadores que apuestan entre ellos.

He aquí una pelea:

¿De qué se tratan las peleas de gallos?

Las peleas de gallos consisten en un enfrentamiento entre dos gallos que pueden pertenecer a la misma raza o a otra calificada en específico como “gallo fino de combate”.  Los animales en crianza, entran a un proceso de entrenamiento para enfrentar a su oponente, y así, con una duración máxima de 15 minutos puedan derribar finalmente a su contrincante. Es una pelea a muerte, pues es esto lo que indica el final del combate y le da la victoria a quien sobrevive. Esta actividad ha sido acogida como entretenimiento, para otros como deporte, y para algunos las peleas de gallos representan parte de su tradición y cultura, mientras que para otras personas que no están de acuerdo con estos “espectáculos”, es un evidente caso de maltrato animal, sumamente brutal, cruel y devastador para las criaturas, donde el sufrimiento y el derramamiento de sangre de lo que han hecho un negocio llena los bolsillos de los entrenadores y el público que empieza a apostar.

El origen de las peleas de gallos se remonta al continente asiático y se dice que tuvieron lugar 3,000 años antes de Cristo. Se hizo popular por toda Europa pues la práctica de crianza de gallos era muy bien vista y así, ya que se les prestaban mucho respeto y adoración por parte de antiguos Sirios. Por su lado, los griegos y romanos, asociaban el gallo de pelea, principalmente, a dioses como Apolo, Mercurio y Marte. De esta manera, la Antigua Grecia lo adopta como Deporte Nacional.  Fue difundida en América debido a la llegada de los españoles que las trajeron consigo a este territorio. Es así, como algunas poblaciones la adoptan e inician la actividad otorgándole al día de hoy, parte de su historia.

Entre los países en los que se le da lugar a esta actividad, están: Cuba, México, Brasil, Japón, Sur de la India, Filipinas, Colombia, Perú, Puerto Rico, República Dominicana, Pakistán, Ecuador, Panamá, España, Francia, Reino Unido, solo por nombrar algunos, ya que en otros la práctica es ilegal y por lo tanto fuertemente penalizada, como: Argentina, Chile, Costa Rica, Estados Unidos, Bélgica, entre otros. Como vemos, la práctica es aceptada en la mayoría de países pertenecientes a América Latina. Sin embargo, se sabe que en algunos países en los que no son permitidas, las peleas de gallos se realizan de forma clandestina.

Los lugares que se emplean para esta actividad pueden variar y reciben el nombre de gallera o reñidero, aunque  generalmente adecúan un espacio similar a un ring, coliseo o ruedo que de forma circular tiene medidas de más o menos 3,40 m de diámetro por 0,80 m y en el interior, la superficie del suelo es cubierta por arena. Los dueños de los animales y los espectadores, se ubican en gradas o bancas que rodean todo el escenario.

En algunas peleas de gallos es común ver que los animales están dotados de  instrumentos que usan como armadura y herramienta para eliminar a su oponente. En ocasiones usan picos de acero o espuelas de plástico o carey, que maximizan el golpe y la herida al rival, y son acomodadas en cada una de sus patas con puntas finas que son afiladas con cera y espadrapo.

 Características del gallo de pelea

Para que nuestra ave tenga una buena pelea de gallo es indispensable la preparación y el entrenamiento del animal proporcionado por quien se encarga de la crianza. Además de otros aspectos que iré exponiendo.

Al haber hecho una profunda evaluación y búsqueda de los mejores ejemplares para peleas de gallos, es posible, a partir de sus características físicas como las habilidades de combate y otras heredadas naturalmente, iniciar el desarrollo y planteamiento de la técnica para el tipo de gallo elegido.  Una pelea de gallo solo termina cuando muere uno de los dos gallos, otorgándole de forma inmediata la victoria al sobreviviente en un lapso no superior a 15 minutos.

Para esta elección es importante que tenga en cuenta las siguientes características en el animal que le garanticen un buen desempeño, tales como:

• El peso
• La talla (grande, pequeña y mediana)
• La valentía y capacidad con la que se enfrentaría estando herido
• El nivel de bravura que tiene
• La resistencia
• La fuerza (cuerpo del animal)
• Su potencia
• La masa muscular (condiciones)
• La rapidez con que ejecute los movimientos
• Su velocidad (esquivar y atacar)
• Casta (principalmente)
• El temperamento natural
• El vuelo y salto
• La capacidad pulmonar (fatiga)

Si ya lo tiene y lo que busca son métodos para el desarrollo de su técnica particular en la pelea de gallo, independientemente del tipo de ejemplar que haya seleccionado, es importante que tenga en cuenta los siguientes puntos para óptimas condiciones del animal:

1. Es usted quien conoce a su gallo fuera de las características físicas y sabrá proporcionarle métodos que se adecúen a él. Es por esto que aquí le proporciono algunas recomendaciones y técnicas muy bien estudiadas para que su gallo tenga el mejor desempeño.
2. Debe tenerse sumo cuidado con los gallos agresivos por naturaleza, pues actúan por instinto y si no se tiene un control sobre ellos no es posible garantizar una buena técnica.
3. Su alimentación será el 70% del resultado cuando se ejecute la pelea de gallo. Para esto en el mercado hay variedad de vitaminas, procure en la medida de lo posible garantizarle una alimentación balanceada.
4. Recuerde verificar el buen funcionamiento y el estado de las herramientas que usa el animal como mecanismo de defensa.
5. Tenga en cuenta que la mayor parte del alcance y capacidad del animal se debe a la alimentación.
6. El gallo de pelea debe ser desparasitado de forma interna y externa.
7. Para tener control sobre el ave debe amansarlo primero, de lo contrario, le será imposible trabajar con la rebeldía que presente el animal.
8. El entrenamiento debe ser moderado y progresivo en la medida del avance.
9. La sanidad es de vital importancia para las condiciones del gallo.

Para el entrenamiento:

1. Existen técnicas para iniciar el proceso, fáciles y prácticas que si aplica con constancia verá resultados significativos.
2. De igual manera debe implementar el uso de herramientas como “trampas” (cuerdas, tela, comida) que le serán de gran ayuda para desarrollar distintas habilidades.
3. Poco a poco adicione vuelos y gradualmente, empiece a aumentar la distancia. Esto le dará fuerza y resistencia en el cuerpo de animal, así como ejercicios en rampas.
4. Para aumentar la velocidad adicionando vuelos y ejercicios aeróbicos, induzca a que la gallina corra hacia distintas direcciones (adelante, atrás y lados) y en círculos, esto le ayudará a acondicionarse al espacio en el que ocurrirá el enfrentamiento. Para su avance, puede usar la técnica del correteo.
5. El gallo debe tener lapsos de descanso entre la ejecución de los ejercicios y días en la semana.
6. Se le deben hacer masajes en los músculos para disolver el ácido láctico.
7. La ubicación del lugar del entrenamiento debe ser un lugar adecuado para ello, donde pueda hacer variados ejercicios y se pueda mover más libremente.

Aquí una pelea: